
Los #BuenosAnuncios unen a la gente
El Brindis de Fin de Año -un ya tradicional evento de nuestra entidad- nuevamente fue la oportunidad para que los presentes intercambiaran cálidos saludos y juntos expresaran los mejores deseos para el 2023. Por este medio, la CAA lo hace extensivo a todos ustedes. ¡FELICIDADES!
2022, con un balance mixto
Por Philip Perez, Presidente de la Cámara Argentina de Anunciantes (CAA)
Por un lado, tenemos una recuperación general post-pandemia que favorece la actividad pero, por el otro, una inflación galopante que afecta el consumo y jaquea los planes de crecimiento. En el medio, se crearon restricciones a la publicidad de todo un sector de la economía: alimentos y bebidas.
Esto me lleva a hablar de la famosa “torta publicitaria”. Como industria, es frecuente que discutamos entre nosotros para la repartición de esta torta. Y cada uno quiere una parte mayor de la que tiene. También nos dicen a los anunciantes que somos “los que tenemos la plata”. Es tiempo de que nos demos cuenta de que la plata no es nuestra, la tienen los consumidores. Y si no nos la ceden voluntariamente comprando los productos y servicios que vendemos, no habrá torta para repartir.
Está de moda atacar el consumo, olvidándose que es el consumo lo que sostiene toda la actividad económica y por ende la actividad humana. Desde los impuestos que financian al estado hasta el trabajo que es nuestro sustento, todo se basa en que haya consumo. Y el consumo se fomenta con el marketing y la publicidad. Por ende, como industria, nuestro principal foco debe ser que el marketing y la publicidad funcionen de la manera más eficaz posible.
Esto significa dejar de discutir entre nosotros y hacer frente común para lo siguiente:
-
Crear un entorno favorable al marketing y la publicidad, tanto a nivel regulatorio como a nivel percepción de la sociedad.
-
Desarrollar métricas objetivas que permitan realmente medir el impacto de nuestras acciones de marketing.
-
Profesionalizar permanentemente nuestro trabajo en todos los ámbitos, ya que el mundo evoluciona muy rápidamente.
-
No tener más miedo a la creatividad y a la innovación.
-
Y, por último, no avergonzarse más frente a los que nos culpan de fomentar el consumo. Deberíamos estar orgulloso de ello, porque beneficia a toda la sociedad.