De acuerdo con un estudio que realizó Kantar durante la cuarentena, la participación masculina en las tareas del hogar y cuidado de los hijos crece, pero los roles no se modifican. Las mujeres siguen a cargo.
El aislamiento aumentó las tareas dentro del hogar en hombres y mujeres. Los números son contundentes: más argentinos y argentinas se encuentran realizando tareas de limpieza y cocina, pero la actividad que crece con mayor fuerza –sobre todo como producto de la suspensión de clases– es la del cuidado de los hijos.
¿La cuarentena tendrá algún impacto futuro sobre la distribución de las tareas? ¿Qué oportunidades surgen para las marcas en este contexto?