Porter Novelli desarrolló un estudio sobre la Cultura de Cancelación, con el objetivo de entender cómo funciona y qué se necesita para regresar a una opinión pública favorable.
El 38% de los encuestados cancelaría una compañía para que la organización cambie. La Cultura de Cancelación ha surgido como resultado del poder que las redes sociales han dado a los individuos y a las masas de amplificar su voz y su mensaje. En el mundo de la Cultura de Cancelación, las empresas son responsables por su voz como marcas, pero también por la voz de sus empleados, principalmente de sus líderes.