Durante el año, se recibieron 18 solicitudes de intervención (56% por empresas, 5% por pedido de autoridades, 22% de particulares, y 17% por autoconvocatoria), analizándose un total de 26 piezas publicitarias, de las cuales 19% resultaron no observables.
Dentro del grupo de mensajes observados, se pidió la discontinuidad y/o modificación de 12 piezas (57%).
Gran parte de las observaciones tuvo relación con el uso de afirmaciones de liderazgo y superioridad en temas competitivos, tales como publicidad comparativa entre productos de calidad no equiparable, recursos confusos ante ventajas que se limitaban a otras presentaciones de la propia marca anunciante, falta de sustento técnico para acreditar un liderazgo contundente sobre la totalidad del mercado, denigración de terceros.
Frente a esto, resulta fundamental que desde la entidad se continúen promoviendo los principios que definen a una publicidad responsable con el fin de preservar la confianza del consumidor y el público en general.
En otros dos casos, los responsables ajustaron la comunicación al tomar conocimiento de la intervención del Consejo, mientras el tema se estaba analizando, por lo que –al contener elementos que podían resultar observables- se les envió una recomendación a futuro a fines de evitar el uso de recursos que pudieran generar interpretaciones no deseadas, de acuerdo con lo previsto en las normas internas de procedimiento.
Se actuó de la misma manera ante un caso en el cual los responsables informaron de manera extraoficial que la comunicación en análisis ya había sido discontinuada.
También se tomó conocimiento de un comercial que incluía una frase explícita de una supuesta observación por parte del sistema de autorregulación de medios en 2017, pero el caso nunca había sido analizado formalmente en nuestro país. Por este motivo, se solicitó a los responsables eliminar dicha referencia con el fin de evitar confusión en el público.
Corresponde advertir que en dos oportunidades se cerró la intervención al devenir la cuestión analizada en abstracto, ya que los responsables de la comunicación objetada advirtieron que la misma no se encontraba en difusión activa por parte de la marca anunciante y que tomarían las medidas correspondientes para eliminar cualquier remanente en medios digitales de terceros.
Los temas más habituales fueron lealtad comercial y veracidad (61%), mientras que el resto tuvo relación con cuestiones de sensibilidad social.